Cafeteando con Lupita

Cuando llega a nosotros el aroma del café, siempre vienen consigo recuerdos o las memorias de personas que han compartido esta bebida traída desde África oriental. Esos pequeños granos de café han logrado que exista la reunión, el instante especial de aquellos que comparten el trabajo, el amor o la propia existencia. 

Este nuevo espacio sirve como espacio de reunión en donde nos escucharemos y acercaremos más a nuestra gente, la de aquí, pero también la de allá; los que habitan nuestro vecindario, nuestras amistades cercanas, el compadre y la comadre, y por qué no, aquellos que estamos también por conocer. Platicaremos con personas que no se detienen y que continúan esforzándose para contribuir con su granito de arena a un mundo mejor.

A través de estos encuentros, descubriremos sus huellas para seguir haciendo camino, un camino que se esparza como el aroma cafetero...